1. Música para sonreir. Escuchar música alegre no solo aumenta la sensación de felicidad y…
El sufrimiento – como manejarlo
Vivimos en un mundo imperfecto, siendo nosotros mismos imperfectos. Por esta razón, no podemos esperar la perfección en cada aspecto de nuestra vida. Como seres humanos imperfectos, viviendo en un mundo imperfecto, somos susceptibles al sufrimiento. Te encuentras enojado, frustrado, decepcionado, herido y luchando en contra de esas cosas que te causan dolor, resistiendo las. Es esta misma resistencia que da entrada al sufrimiento. Una formula para esto será: dolor x resistencia = sufrimiento.
¿Qué es el sufrimiento?
El sufrimiento puede tomar muchas formas, y cada quien lo vive de su propia manera y en diferentes grados. A veces se nos van seres queridos, o luchamos contra problemas de salud, o nos sentimos traicionados/decepcionados por alguien, una pareja con patrones de conducta que te lastiman, problemas económicas o laborales, abuso físico o mental, la soledad, ansiedad, depresión; todos estos son ejemplos del sufrimiento humano, y aún hay muchos otros que ni he mencionado.
El sufrimiento igual se vive en distintas formas:
- frustración
- decepción
- dolor físico
- dolor emocional
- insatisfacción
- enojo
- estrés
- ansiedad
- desesperación
- tristeza
- duelo
- y más
Como entender el sufrimiento
Para poder manejar el sufrimiento en tu vida, primero tienes que entenderlo. Les quiero proponer una idea sobre el tema que ha ayudado a muchas personas en mi consultorio. La idea es esta: el sufrimiento es tu propia lucha contra tus ideales y expectativas que tu mismo creas. Es decir, en tu mente, corazón y todo tu ser, creas ciertas ideas de cómo deberían ser las cosas. Idealizas tu relación de pareja, trabajo, dinámica familiar, hasta la salud y lo que es para ti la felicidad. Cuando las cosas no salen como las habías idealizado, empiezas a luchar contra las mismas y esto es cuando el sufrimiento inicia. Es tu lucha interna contra los factores externos que no cumplen con tus expectativas e ideales. Entonces, podremos decir que el sufrimiento tiene menos que ver con lo que sucede en el exterior y más que ver con lo que sucede en tu interior. Hay excepciones a esta idea, como una mujer que vive bajo el abuso físico y/o emocional de su pareja. En este caso el sufrimiento nace desde lo externo, pero aún así existe el aspecto interno que, si se trata correctamente, le puede llevar a la mujer a vivir libre de ese abuso.
Como Manejar el sufrimiento
Como había mencionado, la aceptación es la clave en el manejo del sufrimiento. Para poder lidiar con esos aspectos de tu vida que te causan dolor, primero tienes que aceptar que existen. La aceptación es reconocer que la situación que estás viviendo es real. Es lo que es. Cuando llegas a aceptar el sufrimiento que estás viviendo, el siguiente paso es un inventario emocional. Aceptando que la situación existe y que no tienes control sobre ella, puedes reflexionar y evaluar la manera en la cual te afecta emocionalmente. Por ejemplo, si tu esposo llega borracho a las 2 de la mañana varias veces durante la semana, sin avisar o dejarte saber en donde anda, es casi seguro que esto se convierta en sufrimiento para ti. No importa cuanto le ruegas, que tanto te enojas o amenazas dejarlo, él sigue con el mismo comportamiento.
Si eliges perseverar en la relación, el aceptar que tu esposo no va a cambiar significa para ti un cambio en la cual te relaciones con el sufrimiento que él te está causando. Dejas de enfocarte en lo externo (la conducta de tu esposo) y empiezas a manejar lo interno (las emociones que esta conducta crean en ti). Si tu sufrimiento se manifiesta en una tristeza profunda, pregúntate cómo puedes encontrar tu propia felicidad independiente de tu esposo. Si tu sufrimiento se manifiesta en enojo que te lleva a constantes pleitos, pregúntate cómo puedes encontrar tu paz interior y dejar de luchar. Aceptando tu sufrimiento también te abre la posibilidad de tomar control de tu vida y tomar decisiones para que puedes vivir más tranquila y en paz, lejos de eso que te causa sufrir.
En conclusión…
Lo que llevo de esta reflexión es que el sufrimiento tiene más que ver con lo interno que con lo externo. Cuando miramos al sufrimiento como algo que sucede dentro de nosotros, como una lucha contra nuestras ideales y expectativas, podemos tomar control. Quizás no podemos controlar los factores externos que nos llevan a sufrir, pero sí podemos controlar como reaccionamos a esos factores. Podemos elegir como manejar nuestras propias emociones. Podemos decidir a no depender en otras personas para nuestra felicidad. Podemos optar por salir de la situación cuando vemos que ya no hay nada más que hacer. En fin, el sufrimiento no es tanto lo que está sucediendo al alrededor de ti, más es lo que está sucediendo dentro de ti y tu decisión de luchar en contra de o aceptarlo.