La Psicología de la Pandemia

Pandemia es una palabra aterradora. Pero el miedo intenso al nuevo Coronavirus parece casi tan penetrante como el virus mismo.

Los casos de coronavirus se han confirmado en más de 100 países, con diferentes niveles de interrupción en la vida diaria en todo el mundo. Es comprensible que las personas están preocupadas por la salud y el bienestar de sí mismas y de sus seres queridos. Pero la pandemia también está sacando lo peor de nosotros.

Las repisas de los supermercados se encuentran vacías a causa de gente haciendo compras de pánico.  Hay casos de asalto de personas, nacionales o extranjeros, simplemente porque tienen rasgos asiáticos o europeos (xenofobia).   

Me gustaría compartir parte de un artículo de la revista Discover en-línea (Megan Schmidt – 3 marzo, 2020 – traducido por Alfonso Galán), en la cual ella entrevista a Steven Taylor, Psicólogo Clínico y especialista en la psicología pandémica.  

¿Cómo define el miedo y qué papel juega durante las pandemias?

El miedo es una reacción emocional, conductual y fisiológica frente a las amenazas percibidas. Cómo hemos visto en esta pandemia, el miedo llega mucho antes de la infección actual: las personas experimentan una ansiedad anticipada. Es un medio para mantenerse a salvo y proteger a sus familias. En general, el miedo es una respuesta adaptativa. Es un sistema de alarma útil que nos impide entrar en peligro. Solo cuando se vuelve excesivamente intenso o persistente, o cuando no hay peligro, se convierte en un problema. 

¿Por qué la gente hace compra de pánico?

A todos se les dice que necesitan abastecerse durante dos semanas. Y la mayoría de las personas no hacen eso a menudo, por lo que realmente no piensan en lo que necesitan, que por cierto no es mucho. Inevitablemente, habrá alguien en la multitud, tal vez algunas personas, que están muy ansiosos y comprarán en exceso. Como somos seres sociales, interpretamos el peligro de la situación según la reacción de otras personas.

Con la compra de pánico, las personas sienten un fuerte sentido de urgencia y miedo a la escasez. Hay casi un efecto de contagio de miedo. Piensan: “Si lo están haciendo, mejor lo hago yo también”. Hay imágenes de personas con carros de compras sobrecargados y estantes de supermercados vacíos que se vuelven virales.

La gente quiere encontrar una manera de mantener el control de la situación. Después de todo, las autoridades gubernamentales y de salud nos dicen que este es un problema grande y aterrador. Sin embargo, el gobierno nos dice que no necesitamos hacer nada especial como usar grandes máscaras, sólo lávese las manos y cúbrase la boca cuando tosa. En la mente de muchas personas, eso no es suficiente para sentirse seguras y preparadas, sienten que realmente necesitan estar haciendo algo, cualquier cosa, para sentirse más preparados. Y esto alimenta la compra de pánico.

¿Cuál es una respuesta “normal” al coronavirus y cómo sería una reacción irracional?

Una respuesta normal sería prestar atención a fuentes de noticias creíbles y evitar sitios web dedicados a teorías de conspiración o rumores. Sigue las pautas de las autoridades sanitarias, mantén un suministro de alimentos y artículos de tocador para dos semanas y prepárate para la posibilidad de auto-aislamiento. 

Hacer frente en exceso sería alguien que está preocupado todo el tiempo y teme a los extranjeros por temor a la infección. [Otro ejemplo es permitirse ser influido por el pánico de otros y asimilar lo mismo, causando paranoia, compras excesivas e hipocondría]. Obsesivamente y constantemente estar revisando su propia temperatura [corporal] o las fuentes de noticias, especialmente las fuentes de noticias dramáticas, y se alarman ante las imágenes que ven. 

Cuando escuchamos la palabra  pandemia, pensamos en miedo y riesgo.  Hemos visto las fotos.  Hemos leído sobre los cientos de miles de casos a nivel global, y sus respectivas muertes.  Las redes sociales han hecho que esta sea la pandemia más profundizada y con más información – buena y mala.

Lo importante es mantener la calma y pensar con mente clara.  No permites que la histeria de algunos te contagia.  Sigue las indicaciones de los expertos médicos y del gobierno.  Todo va estar bien.

Psic. Alfonso Galán
Mérida, Yucatán
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